El encargo fue diseñar una vivienda industrializada, modular, con foco en la eficiencia energética y sustentabilidad. Generamos cuatro módulos que conforman dos viviendas posibles, una de 40m2 y otra de 60m2. Estas viviendas son compactas, de espacialidad interior libre, y con iluminación natural optimizada a través de ventanas y lucarnas que responden al factor de luz día y de uniformidad recomendado. Diseñamos aleros en celosía que permiten el ingreso de la radiación solar en invierno, pero la evitan en verano. La lucarna se levanta desde la techumbre con el ángulo apropiado para la instalación de paneles fotovoltaicos y permitir el ingreso de luz natural en invierno.

La estructura y terminaciones, tanto exteriores como interiores, buscan dar un uso intensivo a la madera, siendo éste un material renovable y abundante en Chile. La casa ha sido pre calificada energéticamente con letra B, logrando un ahorro energético del 60%.